En una notificación administrativa emitida el pasado viernes 26 de enero, se decretó oficialmente el estado de ruina del edificio de Primaria del CEIP San Ignacio. La concejala de Educación, Pepa Pacheco, y el delegado de Infraestructuras, Javier Navarro, comparecieron ante la prensa para abordar las medidas que se tomarán ante esta situación.
El Ayuntamiento, a través de Pacheco, describió el proceso como "concienzudo y riguroso". Tras la declaración de ruina, el siguiente paso será establecer un perímetro de seguridad alrededor del centro educativo afectado.
En octubre del año pasado, después de reuniones con las familias del CEIP San Ignacio, se presentó un borrador de convenio urbanístico al Ayuntamiento. Este convenio buscaba la cesión del suelo del municipio para llevar a cabo las modificaciones urbanísticas necesarias y construir un nuevo colegio que garantizara la seguridad tanto para Primaria como para Infantil. Desde el Gobierno local reiteran su compromiso: "El Ayuntamiento, en fe de su buena voluntad, dispondrá de todo el suelo necesario para que se construya un nuevo edificio".
"Estamos haciendo todo lo que está en nuestra mano y en nuestra competencia; cada administración tiene que ser consecuente con la suya", declaró la concejala de Educación.
Ante la falta de consenso, el Defensor del Pueblo convocó a todas las partes involucradas en una reunión, desconvocada unilateralmente por la Junta de Andalucía. Pacheco subrayó que cada administración debe asumir sus competencias y defendió las acciones del Ayuntamiento en la gestión del centro y del servicio de comedor, resaltando el cambio de un 'servicio frío' a un 'servicio caliente' para garantizar que la comida llegue en condiciones adecuadas. "Estamos haciendo todo lo que está en nuestra mano y en nuestra competencia; cada administración tiene que ser consecuente con la suya", declaró la concejala de Educación.
El Ayuntamiento destacó la transición del servicio de comedor de frío a caliente, que "garantiza que la comida llegue en condiciones adecuadas"
En relación con el edificio de Primaria, Pacheco enfatizó la prohibición de utilizarlo y comunicó a las limpiadoras - son competencia del Ayuntamiento- que no debían entrar. Ante un posible desacuerdo por parte de la Junta de Andalucía, la concejala instó a plasmarlo por escrito para "asumir responsabilidades".
En conclusión, la situación del CEIP San Ignacio pone de manifiesto las dificultades en la coordinación entre el Ayuntamiento de San Fernando y la Junta de Andalucía, dejando en el aire el futuro de este centro educativo y la seguridad de sus estudiantes.
Previamente a la rueda de prensa del equipo de gobierno en el Ayuntamiento, un grupo de madres del centro educativo se daba cita a las puertas del mismo para mostrar un disconformidad e incluso hastío por todo lo que está aconteciendo sobre el colegio y, lo más importante, sin visos de solución a corto o medio plazo.
Una de las madres afectadas, Victoria Eugenia Fernández Fernández, ha hablado para San Fernando Información en representación de dicho grupo de madres, dando a conocer el sentir de todas ellas por la problemática que rodea al San Ignacio. “Mi hijo está en este centro desde los cuatro años y tiene ahora mismo diez. Hace dos años, y por falta de inversión en mantenimiento por parte del Ayuntamiento, con las lluvias el colegio empezó a caerse encima de los alumnos. Vino la alcaldesa, vino Rojas y nos dijeron que el centro se iba a arreglar. Los niños siguen en el centro, mientras que los tienen que ir cambiando de clase a medida que se va derrumbando encima de ellos y de sus profesores”.
Y añade que “pasamos un curso horroroso, con clases incluso habilitadas en el gimnasio y en el colegio de Especial de al lado metiendo alumnos. Nos fuimos de vacaciones y nos dijeron que nos preocupáramos que todo iba a estar arreglado en septiembre, incluso le dimos un ramo de rosas de la alcaldesa. Ellas nos dijo incluso que si no se podía arreglar, el colegio de Primaria se ampliaría. Sin embargo, llega a septiembre y vuelve a venir para decirnos que se iba a arreglar todo. Pero el tiempo pasa y este lunes hemos tenido una nueva reunión en la que no ha aparecido nadie del Ayuntamiento. A día de hoy no sabemos si el colegio se cierra, si seguiremos en las mismas condiciones”.
Victoria Eugenia Fernández afirma que el CEIP San Ignacio siempre se ha caracterizado por ser un centro al que los padres llevan a sus hijos generación tras generación, al ser un colegio de barrio. “Qué van a hacer ahora, avisarnos a último hora de que tenemos que trasladar a nuestros hijos. Que me voy a tener que llevar a mi hijo a la otra punta de San Fernando y sin avisarnos con tiempo. Todo ha sido engaño tras engaño, falsas promesas”.
Esta madre de alumno asegura que todo el estrés que está generando el futuro incierto del colegio está afectando tanto a profesores como a alumnos. “Mi hijo, por ejemplo, tiene déficit de atención y le viene muy mal todo lo que está pasando. Salimos de un covid y nos metimos en un colegio que por no tener mantenimiento, comenzaba a caerse. Cambios de clases, cambios de profesores, profesores dándose de baja y al director incluso le dio un ictus. Hay niños aglomerados en clases muy pequeñas y tienen todos muchísimo estrés. Siempre han sido los mismos profesores, que nos conocíamos como si fuésemos una familia, pero al haber tantas bajas llegan sustitutos que suponen caras nuevas, distintas formas de enseñar…”.
Llegados a este punto, han decidido pasar a la acción. “Vamos a acumular todas las cartas que no han sido remitidas por la alcaldesa y vamos a poner la pertinente denuncia por la manera en la que nos han tenido engañados, dando la espalda y sin dar la cara. Y también por las condiciones en las que están dejando que nuestros hijos están estudiando. De hecho, a día de hoy siguen haciendo deportes en el centro que se está derrumbando”.
La FLAMPA acusa a la Junta de Andalucía
Luisa Guerrero, presidenta de la Flampa (Federación de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos) de San Fernando, resaltó la predisposición por parte del Ayuntamiento, recogido en el convenio urbanístico. También resaltó la facilidad con la que se cedió el terreno necesario para la construcción, la adaptación del edificio de educación infantil, y la colaboración para garantizar la continuidad del servicio de comedor. En este contexto, atribuyó la responsabilidad a la Junta de Andalucía. "La Junta está tirando balones a fuera; no únicamente con este centro si no con más colegios de la escuela pública andaluza", declaró.
"No comprendo porque las familias no entienden que el Ayuntamiento no tiene la potestad de construir colegios ", concluyó.
Respuesta de la Junta
La delegada territorial de Educación, Isabel Paredes, no ha tardado en responder al Ayuntamiento isleño en torno a la polémica que rodea al CEIP San Ignacio. "Lamento profundamente que el Ayuntamiento de San Fernando trate de eludir una vez más su responsabilidad y no se haya presentado esta mañana a la reunión con las familias del San Ignacio, a la que estaba convocada su concejala de Educación para informar sobre la solución ya en marcha para que el alumnado siga teniendo el servicio de comedor. Dejó de lado a las familias para echar balones fuera en una rueda de prensa, en la que no informó de que, unilateralmente, y en un mail a última hora de la mañana del viernes, decretara el cierre del edificio sin atender las alegaciones que tanto la Delegación como las propias familias han presentado"
"El Ayuntamiento de San Fernando, lamentablemente, ni ha asumido durante años su responsabilidad de mantener y conservar en condiciones el colegio, que es el origen de todo, ni ahora ofrece una colaboración leal para alcanzar una solución entre administraciones", finaliza la delegada Territorial.
