La Liga de Fútbol Profesional de España (LFP) presentará, a través del abogado francés Juan Branco, una demanda ante la justicia gala para impedir que se convalide el nuevo contrato de Kylian Mbappé con el PSG al considerar que es "ilegal" porque viola las reglas del juego limpio de la UEFA.
Si la Justicia francesa no decide de forma favorable a la LFP, se buscará una acción de la Comisión Europea y no se descarta presentar una demanda en el Tribunal de Justicia de la Unión Europea.
"Buscamos una nueva decisión como la de (la ley) Bosman, que liberalizó el mercado (1995). Ahora lo que queremos es que se regule el mercado y se expandan en toda Europa las reglas (financieras) de la Liga (española) que son muy estrictas", manifestó Branco en una conferencia de prensa que organizó hoy en un hotel parisino.
Branco, de 32 años, explicó que la primera iniciativa legal será pedir a la ministra de Deportes de Francia, Amélie Oudéa-Castéra, que revoque las homologaciones contractuales de todos los jugadores del PSG fichados a partir del 25 de junio de 2021, fecha de la última inspección llevada a cabo por las autoridades francesas.
Esto incluiría tanto el nuevo contrato de Mbappé, tasado en una inversión de 500 millones euros en tres años, según cifras del letrado, como el de Lionel Messi, fichado por el PSG en agosto de 2021 y que también es objeto de un procedimiento judicial desde entonces liderado por el propio Branco a petición de un grupo de socios del FC Barcelona.
El abogado contratado por la Liga española anunció que prepara también un recurso en el ámbito administrativo para que el campeonato francés realice una inspección de las cuentas del PSG a través de la Dirección Nacional de Control y Gestión (DNCG), un órgano fiscalizador sobre la salud financiera de las entidades deportivas en Francia.
"Hoy en día, Mbappé no puede jugar en el PSG. Sabemos que será difícil (ganar en la Justicia francesa), teniendo en cuenta que el propio presidente Emmanuel Macron ha pedido que se quede", asumió el abogado, famoso por su implicación en el movimiento de los "chalecos amarillos" y por haber representado a Julian Assange en Francia.
Branco dijo confiar que este proceso finalmente prospere en las instancias europeas, al considerar que un club como el PSG, propiedad de un fondo soberano catarí desde hace 11 años, viola las reglas de la libre competencia que rigen el mercado único de la UE.
Por ello, conminará a la Comisión Europa (CE) a que se pronuncie sobre ese respecto, teniendo en cuenta además que el PSG incumple el equilibrio entre ingresos y gastos establecidos por el propio campeonato francés gracias -según denuncia Branco- a sucesivas moratorias que conceden a la entidad parisina.
"Estaba previsto que esta temporada ingresase 180 millones de euros en ventas de jugadores para tener equilibrio financiero, y solo ha vendido un jugador por 7 millones, y encima ha renovado a Mbappé", incidió.
El letrado denunció "un conflicto de intereses" entre la Liga francesa y Catar, acusando a las instancias francesas de favorecer el PSG postergando la aplicación de las reglas de "fair play" financiero porque el campeonato francés depende -en su opinión- del dinero catarí.
Acusó además que "clubes Estado o clubes de oligarcas" como el PSG o el Manchester City minan el fútbol europeo, al obligar a clubes como el Real Madrid o el Barcelona, que sí respetan la normativa, a aumentar ingresos en las entradas al estadio o la venta de camisetas para poder competir en pie de igualdad.
El abogado que representa a la Liga española formuló otra acusación más compleja e indirecta. Sostuvo que las fuertes inversiones de Catar en el PSG obligan al emirato a subir el precio del gas que vende a Europa.
"El dinero de Catar no es mágico como se pueda pensar, lo gastado por Mbappé lo pagamos todos, como consumidores de electricidad".