Los suicidios en las prisiones descendieron un 37 por ciento tras registrar 32 casos consumados en 2021, frente a los 51 contabilizados un año antes. Por contra, aumentaron las tentativas de suicidio, al pasar de 97 en 2020 a 116 en los doce meses del último año (+19,5%).
Los datos forman parte de una respuesta parlamentaria, consultada por Europa Press, en la que el Gobierno recuerda los diferentes programas en prevención de los suicidios que ofrecen una "intervención multidisciplinar" para los internos con problemas de salud mental, tanto los que están privados de libertad como para los que disfrutan de medidas alternativas.
El Ejecutivo señala que se presta atención a los planos sanitario y psicosocial "desde la perspectiva de la recuperación", al objeto de prevenir la reincidencia delictiva por medio de una mejoría en su autonomía y una adecuada vinculación con los servicios asistenciales y sociosanitarios que las Comunidades Autónomas tienen destinados a las personas con estas problemáticas.
En respuesta a Vox, el Gobierno explica los diferentes programas desarrollados desde 2009 para tratar a los internos con patología psiquiátricas: el Programa de Atención Integral al Enfermo Mental (PAIEM), revisado y reformulado en 2013; en 2014 el Programa Puente de Mediación Social para los Centros de Inserción Social (CIS); y en 2017 el Programa Puente Extendido en Medio Abierto.
El control de la administración de medicamentos a internos se lleva a cabo atendiendo a la situación individual de cada uno de los casos con el objetivo de la "mejora en su situación psicopatológica o física", añade el Ejecutivo, que indica esto se hace "siempre con respeto a los derechos individuales y del mantenimiento de los principios de calidad asistencial que se establecen en la prestación de servicios sanitarios a nivel comunitario".