El presidente de la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública y Gestión Sanitaria, Rafael Ortí, aseguró ayer en EL FARO que en la Comunitat Valenciana "estamos haciendo pocas pruebas". "Me preocupa que, cuando vas al médico de familia porque eres contacto de un caso positivo conocido, es probable que te digan que no pasada nada y que te vayas a casa, porque estás vacunado, protegido, y que hagas vida normal; me preocupa un indicador que es la positividad, en la Comunitat Valenciana tenemos una de las positividades en las pruebas más altas de España, y eso quiere decir que estamos haciendo pocas pruebas, que los protocolos que se hicieron en su momento no se han modificado, se hicieron para no generar alarma en un momento en que estaba disminuyendo la incidencia, pero ahora hay que replanteárselos y valorarlos", explicó Ortí.
Respecto al Pasaporte COVID, el doctor Ortí opinó que "no es una cuestión de fe, sino de evidencia científica; hay factores que lo apoyan en la medida que favorezca el aumento de las coberturas vacunacionales para gente que no se lo había planteado o no había encontrado el momento, pero hay que usarlo con cuidado y de acuerdo a consideraciones sociales y teniendo en cuenta las repercusiones que puede tener sobre la economía".
Preguntado sobre la inminente vacunación a los menores de entre 5 y 11 años, el presidente de la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública y Gestión Sanitaria aseguró que, "desde el punto de vista de salud pública, con el objetivo de reducir la transmisión, cuanta más gente haya vacunada, incluso los niños, mejor; desde el punto de vista individual el beneficio es ligeramente superior a los inconvenientes, pero no es tan trascedente; creo que es más importante vacunar a todas las personas que siguen sin vacunar, sobre todo mayores de 50 años y grupos de riesgo, y luego ya en función del ámbito, valorar la vacunación de los niños, empezando por aquellos que tienen factores de riesgo".