El ministro de Consumo y diputado nacional de Unidas Podemos, Alberto Garzón, ha defendido este jueves que se debe contar con una nueva reforma laboral que recupere la "fuerza" de los sindicatos y de los trabajadores frente a los aspectos "nocivos y tóxicos" que contempla la actual normativa, que aprobó en 2012 el anterior Gobierno del PP.
En declaraciones a Canal Sur TV, recogidas por Europa Press, Garzón ha señalado que desde una dimensión política se utiliza el término "derogar" la actual reforma laboral porque es una forma de simplificar el mensaje y de trasladar que la reforma laboral que hizo el PP tiene que se "revertida", porque contempla artículos "nocivos y tóxicos para la economía y las familias trabajadoras".
Ha agregado que desde un aspecto técnico, como ha señalado "con acierto" la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, no existe en el ámbito jurídico el concepto "derogación porque lo que existe es una normativa laboral que se sustituye por otra y, por lo tanto, lo que nosotros tenemos que ver es qué contenidos de la reforma laboral del PP tienen que ser sustituidos y, en este caso, revertidos".
Para Garzón, la reforma laboral del año 2012 tenía un objetivo "no reconocido la mayor parte de la veces, que era bajar salarios y para ello se atacaba la negociación colectiva y la fuerza de los sindicatos para que de esa manera, en la relación entre el empresariado y los trabajadores, existiera una asimetría que beneficiara a los empresarios y así se pudiera establecer unas condiciones laborales favorables para los beneficios económicos de la empresa y desfavorable para los salarios".
Ha indicado que esa realidad obedecía a un contexto económico, el de los años 2012 y 2013, en el que la Unión Europea promovía este tipo de políticas y que ya no tienen nada que ver con el contexto actual.
Para el ministro, ahora la respuesta tiene que ser por la vía de mejorar las condiciones de la clase trabajadora y en la reforma laboral que tenemos que poner en marcha hay que recuperar "la fuerza de los sindicatos y de las familias trabajadoras para que tengan mejores condiciones en el trabajo".
De otro lado, sobre el planteamiento del ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, acerca de la subida de las cotizaciones, ha indicado que es un propuesta que se tiene que conocer "en profundidad" y ha considerado que todo debate que vaya en la línea de hablar "de ingresos y no de gastos va a ser positivo", porque hasta ahora, todo el sistema público de pensiones "siempre se ha intentado ajustar por la vía de los gastos" y con recortes de pensiones.
Sin embargo, según Garzón, en esta ocasión, la propuesta nos habla "de ingresos, de cotizaciones sociales y de que cuanta más gente trabaje y más altas sean las cotizaciones y los salarios, más ingresos tiene el sistema". "Esto es algo positivo y un cambio radical respecto a lo que ha existido hasta ahora y tenemos que hacer que esos ingresos sean justos y que, evidentemente, el sistema en su conjunto mejore en proporcionalidad y progresividad".